José A. Torres, José A. Ceccini, Mª Luisa Zagalaz, Carlina E. Vega, Tomás J. Campoy y Daniel González.

Una tesis defendida en el Departamento de Pedagogía de la Universidad de Jaén aborda la violencia escolar en Paraguay, realizando propuestas para mejorar la convivencia. Su autora es Carlina E. Vega Duette y se trata del primer trabajo relativo a este ámbito que se realiza a nivel nacional en Paraguay.

Gracias a este trabajo de investigación, que se ha realizado a lo largo de cinco años, se ha podido conocer el clima de convivencia escolar desde la perspectiva del alumnado, profesorado y padres/madres de Nivel Medio de Paraguay, presentándose propuestas de mejora, lo que convierte a este estudio en un plan muy ambicioso que tiene como objetivo mejorar la convivencia en los centros educativos.

La investigación se ha realizado con muestras representativas de los diecisiete Departamentos (Comunidades) de Paraguay, en las que han participado más de 1.500 encuestados, entre alumnado, profesorado y padres/madres.

El estudio aporta ochenta y cuatro conclusiones, en las que a modo de resumen se pone de manifiesto que la incidencia de conductas violentas en alumnos paraguayos está en niveles por debajo de países como México, Argentina, Colombia o Brasil. Asimismo, se determina como población de riesgo aquellos alumnos pertenecientes a familias desestructuradas y lo que se denomina como “alumnos diferentes”, o sea, alumnos con absentismo escolar, fracaso escolar y que presentan dificultad en las relaciones con los demás. También se llama la atención sobre lo que se conoce como “acoso escolar silencioso”, es decir, alumnos que sufren comportamientos violentos de sus compañeros, pero no son conocidos ni por padres ni por profesores. La tesis presenta un total de nueve propuestas de carácter ecológico y sistémico, que involucra a sectores, organismos e instituciones que, desde planteamientos eminentemente educativos y desde la prevención, se lleven actuaciones articuladas y coordinadas.

Entre las propuestas hay que destacar la creación de un observatorio para la convivencia escolar en Paraguay, la elaboración de un plan para mejorar la formación inicial y continua del profesorado, el diseño de un plan de acción tutorial nacional y la potenciación de la figura del tutor desde el Ministerio de Educación y Cultura, para su aplicación en los niveles universitario, educación media y educación básica.

Además se propone la elaboración de planes de convivencia, sobre todo desde la prevención, la vigilancia y control de la violencia escolar mediante la creación de la figura del policía de proximidad, la realización de acuerdos con organismos e instituciones paraguayas, la creación de una base de datos donde se recoja la producción científica de investigadores paraguayos, tanto para la consulta como para la difusión, la puesta en marcha de prestaciones sociales (atención a minusválidos físicos y sensoriales, ayudas a domicilio, apoyo a la tercera edad, realización de tareas domésticas, cuidado del medio ambiente, entre otras) para aquellos alumnos que presentan comportamientos violentos, desde un enfoque educativo basado en la elaboración del conflicto mediante reparaciones sociales que le ayuden a tomar conciencia e incorporar en sus vida actitudes prosociales, frente al castigo o represión como forma tradicional de actuación.

Carlina E. Vega explica que se trata de un tema de plena actualidad, que afecta a todos los países con distinto nivel de incidencia y que presenta características mutantes (cyberbullying, happy slapping o brand bullying), de ahí la preocupación creciente en los gobiernos y sectores implicados sobre cómo abordar el tema de la violencia en las escuelas para generar una cultura de convivencia, crean¬do espacios para la paz y formando a ciudadanos participativos para el ejercicio de la democracia. “La escuela no genera violencia, sino que es el espacio donde se cristalizan las tensiones de nuestra sociedad, en donde las desigualdades y la exclusión social se constituyen como factores de riesgo”, explica su autora.

La tesis fue defendida el pasado día 25 de junio en el Departamento de Pedagogía de la Universidad de Jaén bajo la dirección de los doctores Tomás J. Campoy y Mª Luisa Zagalaz Sánchez. El tribunal estuvo compuesto por José Antonio Ceccini, catedrático de la Universidad de Oviedo, José Antonio Torres, catedrático de la Universidad de Jaén, y Daniel González, profesor de la Universidad de Granada.

Autor: Gabinete de Comunicación UJA (F.R.R.).