Ponentes de la segunda jornada.

De lo divino y espiritual, a lo profano y económico. La segunda jornada del Congreso Internacional “Gutierre González y el Renacimiento. Entre Roma y la Monarquía Hispánica” se organizó en torno a dos sesiones dedicadas a las Corrientes Espirituales y Reformistas en el Renacimiento y, por otro lado, a la Economías eclesiásticas en el siglo XVI.

El prestigioso historiador francés Bernard Vincent pronunció la primera conferencia de la segunda jornada del congreso. El doctor Bernard Vincent abordó el tema de la Espiritualidad en España durante el Reinado de Carlos V en la sesión de mañana dedicada a las Corrientes Espirituales y Reformistas en el siglo XVI. Para ello, rescató y reivindicó la figura del hispanista francés del siglo XX, Marcel Bataillon, un estudioso de gran valía un tanto olvidado por la historiografía actual. Vincent es muy conocido por sus trabajos sobre la historia de los moriscos y en reconocimiento a la calidad de su producción científica es Doctor Honoris Causa por varias universidades españolas como Alicante, Almería, Granada y la Complutense.

El doctor Vincent argumentó que la obra de Bataillon –gran estudioso de la obra de Erasmo de Rotterdam- es muy útil para conocer los movimientos iniciales de reforma eclesiástica en el contexto español y durante el reinado de Carlos V. Para Bataillón en España ya existían unas influencias previas al Erasmismo que favorecían una nueva espiritualidad. Otra de sus aportaciones fue el estudio de los primeros pasos de la Compañía de Jesús en España y Portugal, desde la formación del grupo inicial de compañeros de Ignacio de Loyola hasta la creación plena de los Jesuitas y la fundación de sus primeros colegios. Del mismo modo, se ocupó de estudiar la figura de Juan de Ávila, predicador y ascético español cuyas obras ejercieron gran influencia sobre importantes figuras del siglo XVI

Pasos hacia la alfabetización y la educación

Igualmente interesantes fueron las aportaciones realizadas por el doctor Rafael Mauricio Pérez García, de la Universidad de Sevilla, quien pronunció una ponencia titulada “Propuestas educativas y de alfabetización en la Espiritualidad de la España del Renacimiento”. El profesor hispalense explicó que en el marco renacentista de reforma religiosa surge una nueva espiritualidad que se ve favorecida por una mayor alfabetización de la población y la publicación y difusión de más libros gracias a la imprenta. Una gran parte de esta literatura es de tipo espiritual y místico. “Hasta 1560 se escriben una ingente cantidad de libros de espiritualidad. De hecho estamos hablando de unos 225 títulos y 665 ediciones que suman alrededor de medio millón de ejemplares para una Península Ibérica mucho menos poblada que ahora”, subraya. Rafael Mauricio describió una sociedad mucho más alfabetizada que demanda obras de literatura para laicos. “Desde el siglo XIV hay una voluntad de la Iglesia de traducir catecismos, libros de confesión y otras obras del latín al castellano u otras lenguas romances para incrementar su proyección”.

Una de las grandes novedades es que en el siglo XV se empieza a pensar en los niños como sujetos a los que hay que alfabetizar. “Por primera vez, se empieza a pensar que la doctrina cristiana hay que enseñársela a los niños, además de enseñarles a leer y escribir. Esta catequesis y esta enseñanza de la lectura y escritura se hacía con unas tablas, que se colocaban en lugares visibles de las iglesias donde se ponían los diez mandamientos, el credo y los sacramentos. Esta tabla sirve también para enseñar a leer”, comentó. Además de la tabla, comienzan a editarse cartillas que son catecismos que se reparten en las iglesias para que los niños aprendan a leer. “Hay un evidente proceso de alfabetización y además aparecen fundaciones de escuelas como el caso de la Santa Capilla de San Andrés por parte de Gutierre González Doncel”, concluyó.

Las intervenciones matinales prosiguieron con dos ponencias de gran valor. La doctora de Filología Latina de la Universidad de Jaén, María Dolores Rincón González, disertó sobre “La Universidad de Baeza, entre Humanismo y Reforma”. Igualmente, el profesor de la Universidad de Granada, Miguel Luis López-Guadalupe ofreció la conferencia “Vocación asistencial de las Cofradías y Congregaciones Andaluzas del Quinientos”. Gran conocedor de la realidad cofrade de los siglos XV, XVI y XVII, el investigador granadino realizó un completo recorrido por los cambios acaecidos en las cofradías y gremios desde el mundo medieval hasta la época del Concilio de Trento. López-Guadalupe relató el funcionamiento de estas congregaciones que realizaban sus funciones asistenciales y solidarias a través del ejercicio de obras de misericordia, creación de hospitales de sangre, atención a enfermos, la realización de obras de caridad, etcétera. El ponente relató con todo lujo de detalles la idiosincrasia de estas cofradías que, en muchas ocasiones, entraban en conflicto con la autoridad religiosa. Por ello, a finales del periodo estudiado el autor describe los esfuerzos de la Iglesia por reafirmar la jurisdicción eclesiástica sobre estas cofradías.

La Diócesis de Jaén en el siglo XVI

El vicario general de la Diócesis de Jaén, Francisco Juan Martínez Rojas, cerró la sesión matinal con una magistral conferencia en la que desplegó su ingente conocimiento de la historia de la Diócesis de Jaén en el siglo XVI, un periodo histórico en el que los obispos giennenses impulsaron con gran éxito las reformas eclesiásticas. El periodo reformador se inicia con el obispo Luis Osorio que inicia la construcción de la nueva catedral y proseguirá hasta 1600. Martínez Rojas habló sobre la labor de los diferentes obispos, la reforma del clero diocesano en aras de una mayor formación, el impulso que supuso la creación de la Universidad de Baeza, y la expansión de nuevas congregaciones como los Carmelitas Descalzos o los Basilios.

La segunda jornada culminó con dos intervenciones dedicadas a temas económicos. La catedrática de Historia Moderna de la Universidad de Santiago de Compostela, Ofelia Rey Castelao, arrojó luz sobre el funcionamiento de las economías de las diferentes diócesis de la Corona de Castilla en el siglo XVI. “Estas contabilidades de los obispados están realizadas por hombres cualificados, son impolutas formalmente, pero ocultan grandes intereses y una parte de la riqueza eclesiástica. Al evaluarlas se aprecia un fraude constante”, explicó. Para concluir, el profesor de Economía de la Universidad de Jaén, Juan Luis Lillo Criado pronunció la conferencia “Sistemas Contables en la Santa Capilla de San Andrés” donde hizo un repaso del funcionamiento de la contabilidad y la economía de la cinco veces centenaria institución.

Fuente: Congreso Internacional “Gutierre González y el Renacimiento. Entre Roma y la Monarquía Hispánica”.

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