Anthony Gilbert, director de la Escuela de Ciencias Sociales y Trabajo Social de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad de Plymont (Reino Unido), ha asegurado en el III Congreso Internacional de Discapacidad Intelectual ‘La Responsabilidad Social de las Organizaciones hacia la Discapacidad Intelectual’ que es la inserción laboral y el trabajo lo que podrá finalmente normalizar e integrar realmente a los discapacitados.
El especialista, que ha ofrecido la conferencia titulada ‘Desde el cuidado a la ciudadanía: personas con discapacidad intelectual como nuevos ciudadanos del siglo XXI’, ha apuntado seis claves para la consideración final de los discapacitados como normalizados: la comunidad, el apoyo, el dinero, la dirección, el hogar y la autodeterminación.
Así, en su intervención ha expuesto una clasificación de las etapas por las que ha ido pasando el trato de los discapacitados intelectuales a lo largo de la historia: del 1800 al 1900, etapa en la que a los discapacitados se les consideraba ‘bobos’ y se les recluía en centros internos donde no tenían acceso a ninguna opción social ni de inserción; 1910-1970, periodo en el que la institucionalización de los discapacitados les lleva a ser percibidos como peligrosos y a una reclusión en colonias en las que se encontraban segregados del resto de la población con las consecuencias personales y sociales que esto implicaba; 1970-2000, donde se produce un cambio fundamental promoviéndose la normalización de los discapacitados, el cuidado comunitario y su integración, aunque sin embargo, todavía la cuestión de las relaciones sociales, sexuales y laborales se cuestionaba, centrándose el trabajo en la educación y la formación pero no en la inserción laboral; de 2000 hasta la actualidad, un periodo fundamental en el que se consolidan los derechos humanos, recurriéndose al tratamiento de salud mental pero también a otro tipo de tratamientos y se reivindican los derechos humanos, así como el trato igualitario respecto al derecho al trabajo.
Alrededor de 400 personas han asistido al III Congreso Internacional de Discapacidad Intelectual 'La Responsabilidad Social de las Organizaciones hacia la Discapacidad Intelectual', organizado por la Universidad de Jaén y APROMPSI, cuyo tema central ha sido la responsabilidad social de las organizaciones hacia la discapacidad intelectual, debido a la necesidad de abrir una vía de encuentro entre las organizaciones (empresas públicas y privadas) y la sociedad, en lo que respecta al impulso, apoyo y empoderamiento de los colectivos en grave riesgo de exclusión social, en este caso, las personas con discapacidad intelectual.
