Matías Reolid, con el diente de tiburon, en el stand de la UJA.

El investigador de la Universidad de Jaén Matías Reolid ha presentado en Tierra Adentro los resultados de un estudio realizado al diente de tiburón gigante fósil (Carcharocles Megalodon) del Museo de Obulco en Porcuna, que durante la feria expone el ayuntamiento de este municipio en su stand.

Los investigadores del Departamento de Geología de la Universidad de Jaén, Matías Reolid y José Miguel Molina, publicaron recientemente un estudio, el primero acerca de dientes de esta especie en la Península Ibérica, en el que determinaron que se trata de un diente de Carcharocles megalodon, un tiburón gigantesco que vivió en el Mioceno Superior hace alrededor de una decena de millones de años. Concretamente, se trataría de un ejemplar de alrededor de 11 metros de longitud, mucho más grande que el actual tiburón blanco, del que se han encontrado ejemplares de ‘solo’ 6,5 metros hasta ahora.

Para llegar a esta conclusión, los investigadores de la Universidad de Jaén aplicaron una serie de cálculos anatómicos, comparando el diente, hallado en 1981 en las canteras de diatomita de San Félix en Porcuna, con otros dientes fósiles de megalodon que se encuentran en otros lugares del mundo, así como con otros dientes del tiburón blanco actual. La pieza objeto del estudio, la más destacada de los restos aislados de vertebrados marinos que se han hallado en esta zona, tiene una longitud de 123,96 mm desde el ápice hasta la línea basal de la raíz. Los investigadores explican en el artículo que la altura de la corona (92,2 mm), su forma triangular con bordes aserrados, la presencia de una cara lingual convexa y una labial plana, conjuntamente con la raíz angulosa y robusta, permiten determinar que perteneció a dicha especie. Asimismo, confirman que la alta simetría de la pieza, su tamaño y su relación longitud/anchura de la corona permiten afirmar que se trata de un diente superior anterior.

Este tiburón se ha encontrado en sedimentos del sector oriental de la Cuenca del Guadalquivir correspondientes a un momento en el que esta cuenca funcionaba como conexión entre el Atlántico y el Mediterráneo, a través del llamado Estrecho Nordbético, previo a la apertura del Estrecho de Gibraltar.

Autor: Gabinete de Comunicación UJA (F.R.R.):