Cristóbal Gabarrón, artista humanista convencido, participó en las Jornadas Arte y Deporte organizadas por el Departamento de Didáctica de la Expresión Musical, Plástica y Corporal de la Universidad de Jaén, en las que ofreció una charla sobre ‘El sueño de Pierre de Coubertin’.
Autor de pinturas, obras murales y esculturas con motivos deportivos y olímpicos, el artista murciano comenta que “Pierre de Coubertin tuvo la feliz idea de poner en práctica de manera moderna lo que suponían los Juegos Olímpicos en la antigüedad, que era la práctica de deporte como elemento cultural; se hacía deporte pero también actos culturales, lo que se perdió con el tiempo”. “Pierre de Coubertin recupera el ‘mente sana in corpore sano’”.
En 1990, el Comité Olímpico Internacional le encarga la realización de un mural, ‘Historia del Olimpismo’, colocado en el Estadio Olímpico de Baseball, de L’Hospitalet y subsede olímpica para los Juegos Olímpicos de Barcelona 92. Éste sería el punto de partida de su relación con el deporte. “No había hecho nada hasta ese momento, que es cuando yo acepto el deporte y me meto tanto en el proyecto y en su belleza que a partir de ahí recibo más encargos. Es la unión y la especialidad del deporte en mi obra”, comenta.
Su visión humanista ha jugado un papel destacado en su participación en proyectos internacionales. La realización del mural Olímpico “Historia del Olimpismo”, el conjunto de murales “Encuentro 92”, situado en la Plaza de América de la Exposición Universal de Sevilla, en la Isla de la Cartuja, la serie “Doce musas europeas” para el nuevo parlamento Europeo en 1993 o la selección por parte de las Naciones Unidas de la obra “ Amanecer en el Nuevo Milenio” para difundir la celebración de la cumbre que celebrada en 1999, reunió a mandatarios de todo el mundo, son algunos de los ejemplos de su clara vocación internacional.
Deseoso de revertir a la sociedad parte de lo que ésta le había dado, ha auspiciado desde el año 1992 la progresiva creación de cinco fundaciones, que desarrollan un gran número de proyectos encaminados a dar forma a los valores personales del artista. “La importancia de estas fundaciones deben juzgarla los benefactores de las mismas. Cuando creé la primera mi idea era devolver a la sociedad lo que ésta me ha dado de alguna manera. El objetivo es mostrar, difundir lo que es la cultura. En segundo lugar apoyar con becas por todo el mundo a jóvenes artistas. Y en tercer lugar los niños, la explicación para que entiendan que la cultura es parte de su formación definitiva como seres humanos y que es necesaria para su propia personalidad y libertad”, explicaba Gabarrón.
Cristóbal Gabarrón está considerado en la actualidad, por la crítica internacional, como uno de los creadores más representativos de las últimas generaciones de artistas españoles.
