El Museo Provincial de Jaén acoge desde el 15 de septiembre al 15 de octubre la exposición 'Baecula. Arqueología de una batalla', organizada por el Centro Andaluz de Arqueología Ibérica de la Universidad de Jaén y la Consejería de Economía, Innovación y Ciencia de la Junta de Andalucía.

La exposición es el resultado de un proyecto de investigación Baecula, que comenzó en 2002 con la financiación de la Universidad de Jaén y que a partir de 2006 se incorporó la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía y el Ministerio de Ciencia e Innovación.

El Centro Andaluz de Arqueología Ibérica (CAAI) vienen desarrollando una novedosa línea de investigación centrada en el análisis de la Segunda Guerra Púnica en el Alto Guadalquivir.

El director del Centro Andaluz de Arqueología Ibérica de la Universidad de Jaén, Arturo Ruiz Rodríguez, manifestó que los resultados de la investigación, además de en esta exposición, se están presentando en congresos y en diez universidades españolas, “para que sirvan de debate y de foro ante los investigadores y conocedores del tema, ya que hemos conseguido una metodología excepcional, que es casi única en Europa, como que es trabajar sobre una batalla que tiene un espacio de 450 hectáreas reconocidas, aunque hemos localizado el campamento de Escipión a siete kilómetros de la batalla”.

Hasta el momento, se ha descubierto el campo de batalla donde estaba el campamento cartaginés del general Asdrúbal, la ubicación de la ciudad de Baecula –en el término municipal de Santo Tomé-, los movimientos que realizó el ejército de Escipión y está por cinformar la localización de los campamentos romanos.


Arturo Ruiz destacó la metodología utilizada para esta investigación, que no es destructora, sino fundamentalmente prospección arqueológica, “y hemos superado algún tabú, como es la utilización del detector de metales, que parecía que estaba prohibido a los arqueólogos y que, sin embargo, que da unos resultados espléndidos”. También el equipo de CAAI ha trabajado con tecnologías GPS y SIG, “que nos permite hoy tener una visión mucho más acertada de lo que es la distribución de muchos objetos”. En este sentido, apuntó que existen 4.200 puntos localizados en las 450 hectáreas, “de los que sabemos con certeza que 820 son elementos que pertenecieron al momento de esta batalla”, que duró un solo día, en el año 208, con 8.000 fallecidos “y que, por lo tanto, en un día se concentra todo este material y nos llega a nosotros después, movidos por los arados, pero en un espacio de 450 hectáreas, la variación de 15 ó 20 metros del lugar de una pieza nos permite obtener información”.

En la inauguración de la exposición también estuvieron presentes: el Rector de la Universidad de Jaén, Manuel Parras Rosa; la directora general de Bienes Culturales de la Junta de Andalucía, Margarita Sánchez Romero; la delegada de Cultura de la Junta de Andalucía, Mercedes Valenzuela, y el alcalde de Santo Tomé, Francisco Nogueras.

El Rector de la UJA valoró el “buen hacer del Centro Andaluz de Arqueología Ibérica” y subrayó que la prueba más evidente de este trabajo es que realiza una investigación integral, que sigue unos pasos. “En primer lugar, unas personas que convencen a unos financiadores para que aporten recursos y puedan llevar a cabo proyectos de investigación, de interés, y en segundo lugar, unos resultados que no solo los transfieran, como deben de hacer los científicos, a otros colegas, sino realicen un fantástico trabajo de divulgación científica, como es esta exposición, para que los ciudadanos conozcan su pasado y le den valor a la ciencia”.