La Universidad de Jaén organiza hasta el 22 de octubre en el Hospital de Santiago de Úbeda el IX Congreso de la Asociación Española de Ecología Terrestre (AEET), cuyo coordinador es el profesor del Departamento de Biología Animal, Biología Vegetal y Ecología de la UJA José A. Carreira de la Fuente.
La celebración del congreso, de periodicidad trianual, coincide con el vigésimo aniversario de la AEET, efeméride que se aprovechará para avanzar en la progresiva internacionalización del mismo. La AEET es una asociación con casi mil socios que agrupa a investigadores y profesores de Universidades e Institutos de Investigación, así como a otros profesionales, relacionados con el campo de la Ecología.
El congreso se celebra bajo el lema ‘La dimensión ecológica del desarrollo sostenible: ecología, del conocimiento a la aplicación’. El concepto de desarrollo sostenible o sustentabilidad supone la integración en el ámbito científico y político de las tres dimensiones fundamentales a través de las cuales se ejerce la influencia de las actividades humanas sobre el Medio Ambiente: la económica, la social y la ecológica. La implementación del desarrollo sostenible requiere, por tanto, de la interacción en el ámbito político de tres tipos de agentes: económicos, sociales y ecológicos. La interacción de estos tres tipos de agentes se está produciendo mediante la participación en numerosos ámbitos de decisión de grupos económicos, sindicatos, grupos ecologistas y otras fórmulas de expresión ciudadana. En el marco del ámbito científico, las ciencias económicas y sociales han hecho ya grandes esfuerzos en la formulación de modelos de desarrollo sostenible. Sin embargo, la Ecología todavía acumula un cierto retraso en el cumplimiento de ese compromiso. En este sentido, el estudio de los procesos de Cambio Global, entendiendo éste como las relaciones causa-efecto derivadas de las actividades humanas que se ejercen a escala local pero que se manifiestan como alteraciones en los principales componentes de la Biosfera, se ha convertido en un objetivo primordial de la Ecología moderna.
El congreso, que cuenta con la presencia de más de 300 asistentes, consta de una jornada de recepción en la que se oferta un seminario práctico (domingo 18), tres jornadas centrales en las que se desarrollarán seis sesiones plenarias y tres simposios paralelos (días 19, 20 y 21), y por último una jornada dedicada a excursiones de campo (22 de octubre).
La conferencia inaugural lleva por título ‘Reflexiones sobre aspectos comunes para la unificación teórica de todas las Ecologías’, y será pronunciada por el doctor F. Xavier Niell, catedrático de la Universidad de Málaga. También intervendrán ponentes de renombre internacional en la ciencia ecológica como el Dr. Phill Ineson (Stockholm Environment Institute, Univ. York, Reino Unido) que hablará sobre el papel de los suelos en el ciclo global del Carbono y el efecto invernadero; el Dr. Carlos Herrera (Estación Biológica de Doñana, CSIC) que hablará sobre los servicios ecosistémicos que proveen las interacciones entre plantas y animales; o el Dr. Jacques Roy (Director de Investigación del CNRS en Montpellier, Francia) que presentará el Ecotrón, una gran instalación científica auspiciada por la Unión Europea que permite experimentar con modelos a mesoescala de ecosistemas diseñados y construidos por los propios investigadores.
En las sesiones plenarias se abordarán temas como la biología reproductiva y la ecología de poblaciones; la ecología de interacciones y comunidades; autoecología y ecofisiología; biogeoquímica y ecología de sistemas; monitorización y diagnóstico de ecosistemas; manejo sostenible, conservación y restauración de ecosistemas. Por su parte, los simposios paralelos abarcarán la ecogenética de poblaciones vegetales, avances recientes sobre la aplicación de isótopos estables como indicadores de cambio global, y las bases ecológicas para la gestión de los tipos de hábitats de interés comunitario.
Las excursiones de campo tienen por objeto visitar experiencias de ecología aplicada que se están llevando a cabo en el Parque Natural de Cazorla, Segura y Las Villas (restauración de áreas incendiadas con vegetación autóctona), en Sierra Morena (Plan de Recuperación del Lince Ibérico) y en el Parque Natural de Sierra Mágina (conservación de bosques sensibles al cambio climático).
